tag:blogger.com,1999:blog-20382041890278260952024-02-20T21:52:56.552+01:00Quien roba a un ladrón ...C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.comBlogger74125tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-32515606041035834972014-12-19T17:30:00.000+01:002014-12-19T19:06:44.642+01:00¿Amor o costumbre?<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbt_uiX2FIp2DPcqF-01QI3TF1jUIwTrQK8bW8I8oYjdx33lV8YYSRfJMR3KsGIzOGY6wi2KInvnWRWQBNdPekraBiH1J4BzIiKVGxVZ0_iEoIKEQXoxw4syDZ5RDZJAFL4bFcuCRcndE/s1600/pareja-ancianos.jpg.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbt_uiX2FIp2DPcqF-01QI3TF1jUIwTrQK8bW8I8oYjdx33lV8YYSRfJMR3KsGIzOGY6wi2KInvnWRWQBNdPekraBiH1J4BzIiKVGxVZ0_iEoIKEQXoxw4syDZ5RDZJAFL4bFcuCRcndE/s1600/pareja-ancianos.jpg.jpg" height="294" width="320" /></a></div>
<div style="border: 0px; font-family: Helvetica, Arial, 'Droid Sans', sans-serif; font-size: 14px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
Los veía muchas mañanas hace ahora un año y, ahora que vuelven estas fechas, me he dado cuenta de que no están y se han convertido en una más de esas cosas que pasan por tu vida y desaparecen sin que les hayas prestado toda la atención que merecen.</div>
<div style="border: 0px; font-family: Helvetica, Arial, 'Droid Sans', sans-serif; font-size: 14px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
<br /></div>
<div style="border: 0px; font-family: Helvetica, Arial, 'Droid Sans', sans-serif; font-size: 14px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
Tendrían por lo menos ochenta años y aspecto de ser unos señores de pueblo que acababan de perderse en ese universo paralelo en el subsuelo que es el metro de Madrid en las horas punta.<br />
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
<br /></div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
Sentado en una silla de playa, él tocaba en un desgastado violín una melodía irreconocible de vagas reminiscencias navideñas o simplemente sentimentales. </div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
<br /></div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
Sentada en otra silla idéntica, ella miraba la vida y la gente pasar. Sólo de vez en cuando alargaba la mano y pasaba una hoja del cuadernillo de partituras. Ni siquiera parecía escuchar la música. Sólo estaba a su lado, como si fuera un apoyo imprescindible. </div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
<br /></div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
Recuerdo que, al mirarlos, me dio la impresión de que ella fuera la gran razón por la que él se levantaba cada mañana en un frío piso con la calefacción apagada, se aseaba mínimamente y se acercaba a la cocina donde ella ya había preparado un humilde desayuno para compartir. Él por ella y ella por él, armados de una renovada dosis de ilusión combinada con la resignación que regalan los años y los pequeños fracasos compartidos, se lanzaban a las calles aún oscuras, montaban en el metro y se dirigían a una estación del centro, a llenar de música gastada y mercenaria uno de sus pasillos. </div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
<br /></div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
Rodeados de personas encerradas en su propia soledad y que se limitaban a pasar a su lado, ignorándolos la mayor parte de las veces, ellos estaban protegidos en su burbuja. Compartían esa complicidad antigua y cálida de las cosas sencillas, de los días iguales a los anteriores, llenos de cosas tan pequeñas que, si no te fijas bien, parecen vacíos. </div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
<br /></div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
Seguro que, cuando les asaltaba la desesperanza, simplemente se miraban y, de nuevo, todo eso volvía a tener sentido.</div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
<br data-mce-bogus="1" /></div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
Por lo menos, eso me imaginaba viéndolos desde el anden del otro lado.</div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
<br data-mce-bogus="1" /></div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
Hoy quiero pensar que era verdad y que sigue siéndolo, aunque ya no los vea.</div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
<br /></div>
<div style="border: 0px; line-height: 1.428571em; margin: 0px; padding: 0px;">
...</div>
</div>
</div>
C.http://www.blogger.com/profile/07156369182916382183noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-76281855472298390702013-04-09T21:19:00.001+02:002013-06-17T20:12:24.611+02:00Incompetentes y tristes<div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjoR-88PdU88aHISqyKj68A62Nk_ciebOJz7dAjWsXiWKVv1XuhgSsIBf5KirOcvUG1lrS9l7L9eyhX_7lvhviAk7ggV9huk40KTw-oIxOo1IBaGvc8px7jbCO3TDfumiWd_LXMNEpkvws/s1600/incompetence2.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjoR-88PdU88aHISqyKj68A62Nk_ciebOJz7dAjWsXiWKVv1XuhgSsIBf5KirOcvUG1lrS9l7L9eyhX_7lvhviAk7ggV9huk40KTw-oIxOo1IBaGvc8px7jbCO3TDfumiWd_LXMNEpkvws/s1600/incompetence2.jpg" /></a></div>
Parece ser que hay alguien en la Universidad de Harvard que ha hecho un
estudio, según el cual, las personas felices, además de serlo que ya es
suficiente premio, son más productivas y eficientes en su trabajo.<br />
<br /></div>
<div>
</div>
<div>
Yo, que algunas veces me sorprendo con la cantidad de incompetentes que uno se
puede encontrar en las más diversas esferas, lo que no me imaginaba era
que, además, me iba encontrando con personas que son como son de puro
triste que es su vida.<br />
<br /></div>
<div>
</div>
<div>
A mi particularmente siempre me ha parecido triste poner tan poco
interés en hacer bien las cosas y tanto en estropear o fastidiar lo que
los demás se esfuerzan en hacer bien. En realidad me parece muy triste y
frustrante. Pero, no sé por qué, pensaba que a ellos les hacía
disfrutar el ser así,que vivían más relajados y eso les hacía más
felices.<br />
<br /></div>
<div>
</div>
<div>
Confieso que, en algunos casos, ya me había dado cuenta de que se
trataba de gente tóxica, de esa que va malmetiendo, cogiendo los cuchillos por
el filo y pretendiendo que los demás también lo hagamos. Pero pensé que esos eran los menos y que la mayoría eran simples perezosos
mentales, personas sin afán de superación, sin un mínimo de
orgullo, dignidad o interés por hacer algo de la mejor forma posible.</div>
<div>
</div>
<div>
<br />
Y resulta que, simplemente, se trata de pobres infelices.</div>
<div>
</div>
<div>
<br />
No, si al final me van a dar hasta pena.</div>
<div>
</div>
<div>
<br />
Aunque ya decía un amigo mío hace años: "estoy harto de los que, sin mala
intención, andan por ahí fastidiando a todo el mundo de puro ineptos que
son" (no uso sus palabras exactas, que eran mucho más crudas, por sí
alguna persona sensible lee esto).<br />
<br /></div>
<div>
</div>
<div>
Así que hoy, más que apiadarme de ellos, me consuelo un poco.<br />
<br /></div>
<div>
</div>
<div>
Nos hacen la vida imposible a los que los rodeamos, pero, por lo menos, eso no les hace felices.</div>
<div>
<br /></div>
<div>
Aunque tampoco sé si fiarme. Todavía recuerdo de mi época universitaria
que, al menos en las ciencias humanas, no era tan difícil usar los
mismos datos válidos ya fuera para montar una determinada teoría o para hacerlo con otra completamente opuesta. A veces valía con fijarse en la parte de la muestra que convenía a tu teoría y minimizar los datos que parecían indicar lo contrario.</div>
<div>
</div>
<div>
<br />
Igual los de Harvard se han equivocado y los incompetentes, además de ineptos y, en muchos casos, malintencionados, son felices.<br />
<br /></div>
<div>
</div>
<div>
Eso sí que me fastidiaría.<br />
<br /></div>
<div>
</div>
<div>
... </div>
C.http://www.blogger.com/profile/07156369182916382183noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-71779573662832562232013-03-21T00:17:00.000+01:002013-03-21T00:38:44.730+01:00Notas de viaje<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgW0BdA_IwjxUCj8ZoXWSygy1PZHlc2TOVWlibBM7f3HbgHnAHjsXjEgAb_mvq6u3rMrJGkieKeo2k2c2a7BiZYLU06szNz66GzS5fBBxSUR_Q_iuq7i9D7Di9SWwdNFaLVRfdpAtg5kQE/s1600/notasdeviaje.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"> <img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgW0BdA_IwjxUCj8ZoXWSygy1PZHlc2TOVWlibBM7f3HbgHnAHjsXjEgAb_mvq6u3rMrJGkieKeo2k2c2a7BiZYLU06szNz66GzS5fBBxSUR_Q_iuq7i9D7Di9SWwdNFaLVRfdpAtg5kQE/s320/notasdeviaje.jpg" /></a>
<br />
Otra vez, camino del aeropuerto, me entran ganas de volver a coger bolígrafo y un papel.<br />
<br />
Quizá escribir es eso, una forma más de viajar. Están los viajes de verdad y los viajes imaginados, los que se viven sólo en el interior de uno mismo.<br />
<br />
Escribir es una forma de viajar sólo. Es probable que no haya nadie más sólo que el que se enfrenta a un proceso creativo individual. Se trata de algo íntimo, uno solo ante sus recuerdos, sus habilidades limitadas, sus trampas y recursos, sus pudores, ... todos ellos conspirando o ayudando para que salga algo que, para lo bueno o para lo malo, siempre se lleva parte de uno mismo.<br />
<br />
Viajar, y sobre todo viajar solo, es la gran oportunidad de encontrarse con uno mismo.<br />
<br />
Viajar es como envejecer, pero a gran velocidad y con derecho a vuelta: tu contexto, todo lo que te rodea se vuelve diferente, evoluciona, se transforma y tú, con los mismos ojos, ves como las cosas cambian, como la realidad se vuelve otra, al mismo tiempo ajena y ligada a ti, sin que puedas hacer gran cosa para controlarla o para evitar que ella, poco a poco o de golpe, te cambie a ti.<br />
<br />
Escribir, a veces, también es un viaje interior. Es entrar en un mundo paralelo, en el que pasan cosas o fluyen ideas y palabras ligadas a ti, pero al mismo tiempo ajenas desde el momento en que están escritas. Palabras e ideas que te llevan a mundos de los que puedes volver, pero de los que la persona que vuelve no es exactamente la misma que la que se fue.<br />
<br />
No estoy seguro de si hay algo de cierto en lo que he escrito hasta ahora o sólo es una idea que se me ha metido hoy en la cabeza. Sólo sé que, en mi caso, las pocas cosas que escribo, suelo hacerlas mientras viajo solo.<br />
<br />
Quizá sentirme extraño y en movimiento me pone en un estado más próximo al que necesito para crear.<br />
<br />
Quizá sentirme extraño y ajeno al mundo que me rodea sea parte de lo que hace fluir palabras e ideas.<br />
<br />
No deja de ser una desconcertante y, al mismo tiempo, feliz sensación.<br />
<br />
...C.http://www.blogger.com/profile/07156369182916382183noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-8240666318707412942012-04-16T19:34:00.001+02:002012-09-05T09:09:43.459+02:00Frases ... de esas<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiaV1Ob5Kjrjn9sd7-Pqur7j7K1K0tuhrX9zWW1j9AXDpWdZoipTRr-3XwR2Ve8QYmQkxmhWdM64zjPbBi1Zb5L8loba3oV1zrFKLZ-vvT-Srng8dtps0GjZSMsVfYresfIG89IInD4z0E/s1600/Nube4.PNG" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiaV1Ob5Kjrjn9sd7-Pqur7j7K1K0tuhrX9zWW1j9AXDpWdZoipTRr-3XwR2Ve8QYmQkxmhWdM64zjPbBi1Zb5L8loba3oV1zrFKLZ-vvT-Srng8dtps0GjZSMsVfYresfIG89IInD4z0E/s320/Nube4.PNG" width="293" /></a></div>
Llevo días buscando algo que contar y no estoy seguro de haberlo encontrado ni casi de si sabré cómo hacerlo.<br />
<br />
Para empezar, en el tiempo que llevo sin escribir en este blog (o mejor, sin escribir a secas, porque lo otro es llenar páginas/pantallas), hasta me parece que las modas han cambiado y ya no se puede poner un post sin una foto. Si no la pones, queda feo en esas tiras en las que tus amigos te han incrustado en su propio blog, para que todo el mundo pueda ver que llevas un año sin escribir y tú te avergüences cada vez que pases por allí.<br />
<br />
Así que he pensado en buscar una foto y una idea, pero, como no la he encontrado todavía, me he puesto a escribir para ver si la inspiración me pillaba trabajando. Sé que es lo que dice todo el mundo que sabe de esto que hay que hacer, así que intentaré ponerme de vez en cuando "a escribir", para ver si, en una de estas, me ataca la inspiración por la espalda y escribo <i>alguna frase ... de esas</i>.<br />
<br />
Os preguntaréis qué son <i>"frases ... de esas"</i>.<br />
<br />
Pues son <i>frases ... de esas</i>: de las que me hacen parar cuando leo algo; de las que me hacen disfrutar incluso cuando leo novelas mediocres y me las encuentro en medio de un párrafo; de las que quedan bien incluso en un <i>tuit</i>; de las que subrayo cuando estoy leyendo; de las que <i>mataría</i> (en sentido figurado, claro) por haber escrito yo mismo.<br />
<br />
Os confieso que he encontrado <i>frases ... de esas</i> en novelas que luego me han parecido bastante flojas, en algunas poesías, en canciones (algunas de ellas bastante previsibles y facilonas, menos en esa frase mágica). En cambio he leído novelas magníficas en las que no he sido capaz de encontrar ninguna de esas frases (¿igual porque eran tan buenas novelas que no me he parado a ver las frases de una en una?).<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
Hace poco cambié de Kindle y, al pasar las cosas del viejo al nuevo, moví también el fichero de los subrayados. Lo abrí y descubrí que, en el tiempo que había estado usándolo, había subrayado cosas de libros que casi no recordaba ni haber leído. En general, <i>frases ... de esas</i>.<br />
<br />
Algunos ya sabéis que soy un envidioso y que la envidia ha sido lo que me ha hecho volver a escribir cosas en este blog varias veces. Bueno, pues eso es lo que me ha pasado también esta vez. Como el propósito de hacer más ejercicio después de cada navidad, hice mi propósito de volver a sentarme a escribir cosas de vez en cuando, a ver si hay suerte y consigo escribir <i>una frase ... de esas</i>.<br />
<br />
Tengo que decir que he tardado poco más de una semana en hacerlo, así que, por el momento, el resultado es mucho mejor que con lo del ejercicio.<br />
<br />
Ahora sólo hace falta ver cuanto tardo en dejarlo de nuevo y si, en este caso, también "mejoro" el tiempo de respuesta y vuelve a pasar otro año antes de escribir el siguiente post.<br />
<br />
Seguiré buscando ideas, fotos y, sobre todo, <i>frases ... de esas</i>.<br />
<br />
Pero no os lo toméis a mal si no vuelvo a escribir en un tiempo.<br />
<br />
Igual es que no las encuentro.<br />
<br />
O igual es que no las he buscado lo suficiente.<br />
<br />
...C.http://www.blogger.com/profile/07156369182916382183noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-36375393270823900962011-02-09T23:39:00.002+01:002013-04-16T15:59:51.300+02:00Vuelo<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg1KryHIokNeJYbNg929lc1ZSODy12_4RfOgDRTl3jZ5cqf9RVIfxSv7DkWm1BvlQfMhH5Odno529uGxhOa30Ckbq5nY2UNud0FsmIM1gDdVsCPkgMym5ZcraA0FGolW3NbfFCM1mecpuE/s1600/Vuelo.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="214" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg1KryHIokNeJYbNg929lc1ZSODy12_4RfOgDRTl3jZ5cqf9RVIfxSv7DkWm1BvlQfMhH5Odno529uGxhOa30Ckbq5nY2UNud0FsmIM1gDdVsCPkgMym5ZcraA0FGolW3NbfFCM1mecpuE/s320/Vuelo.jpg" width="320" /></a></div>
Vuelo y, desde el aire, todo es insignificante.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Ciudades y pueblos, que, por tierra, requieren horas y curvas casi incontables para ir de uno a otro, se ven como si estuvieran uno al lado de otro.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Luce un sol espléndido, de tímida primavera adelantada o de invierno en tregua, porque se ven, no tan lejos, los picos de las montañas cubiertos de nieve.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Bajo mis ojos aparece un valle distinto del resto cubierto de una capa algodonosa. Una nube perezosa aun no ha sido capaz de levantar el vuelo pasadas las cinco de la tarde.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
De repente me doy cuenta de lo simple, parcial e insignificante que es la percepción humana: seguro que los habitantes de ese valle piensan que el de hoy es un día gris, oscuro, frío y lleno de niebla, para ellos y para todo el mundo.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Yo, desde este avión, veo con claridad que, en el mundo en general, brilla un sol cálido y dorado y sólo un espacio de unos pocos kilómetros cuadrados, casi despreciable a esta distancia y velocidad, está sumergido en la niebla.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Quizá eso pasa también algunas veces: sólo vemos las sombras que nos rodean, pero el mundo está lleno de luz a sólo un paso de nosotros.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
¿O quizá no?</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
…</div>
C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-23285595128449963282010-10-07T19:37:00.002+02:002013-04-16T15:58:43.449+02:00Épica de lo cotidiano, intermedio o “con canas y a lo loco”<div class="MsoNormal">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjIhEGx8fyD7orLH2KT3DsTfplqL-3EYO7avvFQWETCYmze4NHwoJXZroYPc85UZCQymF-DDO2HA87X6dwDah-8MOlqsZU1_FCrwbR4vQj9uq1k3tf8AIJ4XzmmElZkAHH1p5qYyNEcx3I/s1600/usarytirar.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="243" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjIhEGx8fyD7orLH2KT3DsTfplqL-3EYO7avvFQWETCYmze4NHwoJXZroYPc85UZCQymF-DDO2HA87X6dwDah-8MOlqsZU1_FCrwbR4vQj9uq1k3tf8AIJ4XzmmElZkAHH1p5qYyNEcx3I/s320/usarytirar.jpg" width="320" /></a></div>
Como veis por el título, este post iba a hablar de una cosa y acaba hablando de otra que no sé si tiene mucho que ver con la original, pero, a estas horas y alturas, no sé si la disciplina creativa es mi punto fuerte. Así que he decidido rehacer los dos primeros párrafos, cambiar el título y dejar el resto como ha salido.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Iba a escribir sobre otra cosa. Sobre la gente que se cuenta la vida a sí mismo o a los demás envolviéndola en una especie de épica que convierte sus anécdotas en aventuras, con un falso pose de trascendencia, de heroicidad, que no suele percibirse si uno tiene la oportunidad de observar directamente la que podemos llamar "versión original". Es un tema sobre el que ya he escrito varias veces y que me interesa mucho. Los puntos de vista, las pequeñas falsificaciones conscientes o inconscientes, … que transforman la realidad. Lo que me ha sucedido es que hace ya varios meses que no escribía en este blog (bueno, que no escribía, a secas) y he cometido el error de intentar explicarlo. Así que otra vez será lo de la épica de lo cotidiano.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Respecto a lo del intermedio creativo, no sé por qué, pero lo que se me iba ocurriendo en los últimos meses, lo escribía en un papel por ahí suelto y luego, cuando lo iba a pasar aquí, ya no me parecía que tuviera ningún interés. Así que no lo he pasado. Es más que probable que eso de la falta de interés ya les pasara a varias de las cosas que he escrito aquí con anterioridad, pero, en la mayor parte de los casos, no me había dado pudor o simplemente pereza ir escribiendo, sin más.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
A veces pienso que un blog es como una cámara digital, allí disparas y disparas fotografías sin importarte mucho si son las que querías sacar o simples pruebas. Tampoco importa demasiado, poco a poco llegan nuevas fotos, nuevas capas, que tapan las anteriores y que cubren las pruebas fallidas, sin que se note demasiado. La pena es que también cubren aquellas que te salieron bien.</div>
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<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Así que su principal ventaja es también su mayor defecto: todo es efímero y pasa a mejor vida rápidamente, por el simple procedimiento de ir acumulando capas encima. Tanto lo bueno, como lo malo desaparecen comidos por lo cotidiano. A una foto que tenía "algo", le sigue una mediocre y desenfocada que la cubre. A un post que es fruto de una reflexión profunda y demorada, a veces de años, y en el que incluso has podido acertar con el lenguaje al escribirlo, le sigue uno insustancial o de trámite.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Me parece que eso le quita un poco de reto y hasta de sentido a las cosas que haces con la cámara digital y con los blogs.</div>
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Ya sé que ahora está muy de moda hacer cosas de usar y tirar, escribir SMSs sin mayúsculas ni acentos, ni siquiera poner todas las letras. Me consta que hay gente que cuenta su vida en Facebook o incluso en Twitter con frases de un máximo de diez palabras, que la mitad de las veces sólo envían a otra página o un video que han encontrado por ahí, sin valoraciones o, como mucho, con algo del tipo "mola", "jijiji", "genial", … o "¿a qué está muy bien?", en el caso de derroche lingüístico.</div>
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No me parece ni bien ni mal, cada uno se expresa como puede y quiere, pero a la larga me resulta vacío y hasta un poco estúpido.</div>
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Será que me hago viejo de nuevo (creo que ya os he contado que ya lo fui a los dieciocho).</div>
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Pero esta vez "con canas y a lo loco".</div>
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C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-43092921347121796192010-05-12T23:29:00.000+02:002013-04-16T15:46:00.584+02:00Lunes gris<div class="MsoNormal">
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEirphL8Iuj9LZz-HOkOy24xMW8GUaQCDn2vvkIjB5VvAnxD_h12hDrzVOq3uElGqQlW2gJE3mhXZwe_O0l5M6VPMKIvc_Z7fLUdoUEA2fUpUR8542BRPq4nJ5XDdYybIkUSyijzPO2riuM/s1600/spanair.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="161" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEirphL8Iuj9LZz-HOkOy24xMW8GUaQCDn2vvkIjB5VvAnxD_h12hDrzVOq3uElGqQlW2gJE3mhXZwe_O0l5M6VPMKIvc_Z7fLUdoUEA2fUpUR8542BRPq4nJ5XDdYybIkUSyijzPO2riuM/s320/spanair.jpg" width="320" /></a></div>
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Lunes gris en un mundo gris.</div>
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Interior, también gris, de un autobús y sonando por mis auriculares una canción, casualmente, gris como todo lo demás.</div>
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El autobús es uno de esos que, en el argot aeroportuario, llaman "jardineras". Porque, sí, estoy en el aeropuerto y el color del suelo por donde avanzamos despacio es parte de este mundo gris. El resto del gris lo pone el cielo sucio y somnoliento, con nubes, que tiene hoy Madrid.</div>
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Salgo de viaje con Spanair y me he desayunado en la radio con un repaso de las estupideces humanas y chapuzas que llevaron al accidente de hace casi dos años en este mismo aeropuerto.</div>
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Es un detalle de muy mal gusto ponerte ese menú para desayunar a las seis de la mañana cuando vas a viajar en avión dentro de un rato.</div>
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No sé si es el lunes, las nubes, la tristeza que casi siempre invade los aeropuertos, llenos de enormes pájaros muertos de metal y de personas, muchas de ellas solas, que esperan algo con miradas apagadas.</div>
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No sé si son las noticias que oía al desayunar o el desaliento que invade esta época difícil.</div>
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No podría decir cuál es la razón exacta, quizá sea una suma de todas ellas, pero hoy el gris parece más gris.</div>
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Y más sucio.</div>
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C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-84259576966687401172010-04-12T23:25:00.001+02:002013-08-08T13:18:26.261+02:00Espectáculos urbanos<br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhHFBZsx6scQQuwS7dspGrRbzbnQ6i25FYXHYHrkntTcdjlAa4TJ3SXJhgzJPykP9zQmPsgWQNDdNtRmD0zhuI6nt5WE-peD4LiMFyjDh4kOlabqv5leOXJNfDKTEYjYtTFsklJ0sGhZZU/s1600/metro.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="194" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhHFBZsx6scQQuwS7dspGrRbzbnQ6i25FYXHYHrkntTcdjlAa4TJ3SXJhgzJPykP9zQmPsgWQNDdNtRmD0zhuI6nt5WE-peD4LiMFyjDh4kOlabqv5leOXJNfDKTEYjYtTFsklJ0sGhZZU/s320/metro.jpg" width="320" /></a></div>
Lo bueno de una gran ciudad como Madrid es que, sólo por pasear por sus calles, mirar a través de la ventana del autobús o fijarte en tus compañeros de vagón en el metro, tienes la oportunidad de conocer mucha "gente especial".</div>
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Adolescentes pertenecientes a alguna tribu. Señores maduros con americana verde hierba, pantalones blancos de lino y cara de, por lo demás, no ser nada raros. Una señora que me cruzo casi todos los días y que lleva una bufanda o pañuelo al cuello, subidos hasta las orejas incluso en julio. Curas de negro riguroso y con alzacuellos. Heladeros <i>rastafaris </i>que han montado una embajada de Jamaica en un puesto prefabricado de helados. Estudiantes de algo raro que viajan todos los días con un <i>trolley </i>en el metro y que bajan siempre por mi calle. Miles de personas llegadas de países que hasta hace muy pocos años nos resultaban tan extraños e inalcanzables. Señoras y señores que, aunque llevan casi cincuenta años aquí, tienen aspecto de acabar de salir en ese momento de su pueblo de Zamora o Albacete. Inverosímiles combinaciones de ropa, peinado, calzado, ...</div>
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Todo a tu alcance. Sólo tienes que pasear con los ojos bien abiertos. </div>
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También ayuda mucho acertar con la banda sonora. He descubierto que, si tienes puestos los auriculares, en estos casos, el mundo puede parecer un vídeo-clip o una secuencia posmoderna de cine neorrealista.</div>
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Eso es todo: mirar, dejarse sorprender y disfrutar del espectáculo de lo cotidiano.</div>
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C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-26899525020743459132010-04-06T23:10:00.004+02:002013-08-08T13:33:53.589+02:00Cuatro meses después<div>
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgw8ABgs98ysCx-Glppc82YseFjT-FFjf1R4g89Jxlb20aah0zl25dAYNB6N-vv8wvWJ1wSH1Rmv1KKN41JoRQW2uxERRh0IAQToIO_5C_5_kWGXiTypFvMKjjn0z3uT3Y-pXO1MkWk3sM/s1600/calendario4.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgw8ABgs98ysCx-Glppc82YseFjT-FFjf1R4g89Jxlb20aah0zl25dAYNB6N-vv8wvWJ1wSH1Rmv1KKN41JoRQW2uxERRh0IAQToIO_5C_5_kWGXiTypFvMKjjn0z3uT3Y-pXO1MkWk3sM/s320/calendario4.jpg" width="270" /></a></div>
Hace cuatro meses escribí un <i>post </i>y, desde entonces, no había vuelto por aquí.<br />
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Puedo poner mil disculpas, algunas ciertas y otras inventadas, pero la verdad es que no sé muy bien por qué hace tanto que no escribo nada.</div>
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Supongo que algunos ni siquiera me habéis echado de menos últimamente: <i>¡ah, sí! conozco ese blog, "quien roba a un ladrón ..." se llamaba ¿no? Parece que ya no lo actualiza. Yo hace ya tiempo que no lo miro. Total para qué, si ya no hay nada nuevo</i>.</div>
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Os confieso que estaba un poco aburrido de verlo, siempre tan parecido a sí mismo. Así que, a falta de ideas para el contenido, he decidido cambiar el envase. Ya sé que es una solución fácil, una pequeña trampa, pero por algo tenía que empezar. Además, siempre puedo abrir un debate sobre si antes era más bonito o más feo que ahora.</div>
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Sólo espero que en los próximos días o semanas haya también algo nuevo en los contenidos, que se me ocurran cosas que contaros.</div>
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Para los que se sientan defraudados porque sólo he cambiado el diseño, tengo que deciros que, en el fondo, me alegro: eso quiere decir que todavía confiáis en que os cuente algo nuevo.</div>
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Ahora sólo espero que me visiten las musas. Aunque, como decía algún escritor que oí hace años: <i>la inspiración existe, pero hace falta que te pille escribiendo</i>.</div>
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Hasta pronto.</div>
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(espero)</div>
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C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-20916790373827212942009-11-14T10:34:00.001+01:002014-02-25T16:46:57.856+01:00Hay momentos …<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPE73m6lQzwmPSJkkCXPvVPPVPE1oqw1YbU2i79kZLgnCJnodDjAvgZ60XSwgWRsBR_r4c0NFswp3jq1VaGhzmSjBLN4Auq4l-P_YYSvCypl4Ft5vrkwRDiqS2g8h50BWedysL61M1Xlc/s1600/imagen+de+freedigitalphotos.net.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPE73m6lQzwmPSJkkCXPvVPPVPE1oqw1YbU2i79kZLgnCJnodDjAvgZ60XSwgWRsBR_r4c0NFswp3jq1VaGhzmSjBLN4Auq4l-P_YYSvCypl4Ft5vrkwRDiqS2g8h50BWedysL61M1Xlc/s1600/imagen+de+freedigitalphotos.net.jpg" height="216" width="320" /></a></div>
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Hay momentos en que parece que el tiempo está congelado.</div>
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Hay momentos en que estás en un tren, dando una vuelta sin fin a un valle verde como tus recuerdos.</div>
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Hay momentos en que escuchas en el ipod canciones de hace unos años, llenas de sugerencias.</div>
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Hay momentos en los que te envuelve esa sensación somnolienta y esperanzada de un día otoñal recién estrenado, limpio y azul después de una noche de lluvia.</div>
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Hay momentos en que sientes esa ternura triste que produce acabar de despedirte de personas a las que quieres.</div>
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Hay momentos en los que, al mismo tiempo, te invade la alegría contenida de empezar el viaje de retorno a casa, a estrechar entre tus brazos a las otras personas que dan el sentido a tu vida.</div>
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Hay momentos en los que sientes que tu corazón está al mismo tiempo en dos sitios o quizás no está en ninguno, ni siquiera contigo.</div>
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Hay momentos en los que puede ser que el tiempo no esté congelado, pero tu corazón, tu cerebro y tu vida, van más despacio, como si tuvieran miedo a romper algo que sabes que más tarde ya no va a estar ahí. </div>
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C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-47302238008694033342009-09-17T22:46:00.001+02:002009-09-17T22:46:21.178+02:00Ese impostorTengo que anunciaros algo muy importante: ese impostor al que conocéis no soy yo.<div><br></div><div>Hace tiempo que lo sospechaba. Me veía en las fotos y siempre me parecía que era otro el que había sido capturado por la máquina. Incluso, algunas veces, me veía reflejado en un juego de espejos, de esos que invierten tu imagen habitual y muestran la que se supone que ven los demás, y me parecía que allí había un intruso.</div> <div><br></div><div>Pero ahora lo tengo más claro que nunca.</div><div><br></div><div>El otro día me oí en una grabación y descubrí que el que se suponía que era yo, incluso decía las cosas que yo probablemente quería haber dicho en la ocasión en que me grabaron, era otra persona. Yo no tengo esa voz. Yo no hago esas pausas, ni ... </div> <div><br></div><div>No sé cómo justificarlo, pero estoy seguro de que no era yo.</div><div><br></div><div>Así que he llegado a la conclusión de que hay por ahí un extraño, que pone una voz impostada y se parece algo a mí, pero con los rasgos al revés, con un extraño perfil, sonrisa congelada y expresión eternamente cansada. Ese extraño se hace pasar por mí y es al que vosotros debéis ver y oír cuando yo estoy con vosotros.</div> <div><br></div><div>No os fiéis de él. Es un impostor.</div><div><br></div><div>Alguien me dijo una vez que mi voz transmitía confianza, pero no es mi voz, es la de ese usurpador. Supongo que ese es uno de los trucos que usa para hacer bien su trabajo y que todos hayáis creído que yo era así. </div> <div><br></div><div>Pero hoy he decidido no esperar más y avisaros ya: ese no soy yo.</div><div><br></div><div>Yo no tengo esa voz, ni hablo así.</div><div><br></div><div>Yo no tengo ese perfil.</div><div><br></div><div>Yo no soy así ... creo.</div> <div><br></div><div>No puede ser que sea así y haya vivido engañado todos estos años.</div><div><br></div><div>...</div><div><br></div><div><br></div> C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-40729173466800252022009-07-30T14:43:00.001+02:002009-07-30T14:43:39.815+02:00Frenesí veraniego y soplos de aire fresco.Es ya un clásico.<div><br></div><div>Todos los años por estas fechas me quejo del estrés prevacacional; de tener que estar cerrando cosas a todo correr; del miedo a que, a ultima hora, algo se tuerza y no pueda coger las vacaciones tan ligero de equipaje como me gustaría. </div> <div><br></div><div>Este año es distinto.</div><div><br></div><div>No sé si me pasa como con el calor, que ya no sé si me estoy acostumbrando al que hace en Madrid o que este año, aunque también hace mucho calor, es menos sofocante que otros. El hecho es que este año mi frenesí prevacacional no tiene nada que ver con el miedo a que las cosas del trabajo se me tuerzan a mí, sino con el descubrimiento de que, por fin, se le empiezan a torcer a otras personas que yo creo que, honradamente, lo merecían.</div> <div><br></div><div>Aunque todos sepamos que el mes de julio en Madrid suele ser sofocante y que el mundo laboral tiende a ser injusto, siempre es un soplo de aire fresco y un alivio que, al menos este año, lo sean un poco menos.</div> <div><br></div><div>Que dure y que no nos toque una vuelta de vacaciones bochornosa y tormentosa.</div><div><br></div><div>Aunque todos sabemos que las rachas de viento afectan mucho a las (y los) veletas.</div><div><br></div> <div>...</div><div><br></div><div><br></div> C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-41402178812538374792009-05-28T23:05:00.002+02:002009-06-10T15:53:50.574+02:00Ganas de hablar, taxistas y aeropuertos<p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">Este ya es mi tercer día en Canarias y también el tercer aeropuerto, la tercera compañía aérea diferente, la tercera charla-reunión sobre el mismo tema y … el tercer taxista que me cuenta su vida.</span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">Ahora tengo un agravante, hay un avión para Madrid, que debería coger, y que todavía no ha llegado. Afortunadamente no es el tercer retraso, porque el resto de los aviones ha funcionado bien. Este detalle es importante, porque en tres días he estado en tres islas diferentes y he tomado, incluyendo el que espero en este momento, un total de cinco vuelos distintos. </span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">He conocido el aeropuerto, la carretera que lleva de él a la correspondiente capital y dos o tres calles de Lanzarote y Fuerteventura, además de Gran Canaria, que ya conocía.</span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">Ahora estoy en el último y más visitado de los aeropuertos (cada noche he vuelto a dormir en Las Palmas) y espero llegar más pronto que tarde a mi casa, que empieza a parecer un objetivo inalcanzable. En este momento estoy sólo, mirando de vez en cuando a una pantalla de esas múltiples de los aeropuertos, en la que aparece mi vuelo como retrasado y sin mucha más información y me acuerdo de la gente que he conocido estos días. Todos amables y con deseos de agradar, más o menos. Pero, entre todos ellos, han destacado los taxistas. </span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">Una vez más, me he enterado de las vidas o de parte de ellas de varios taxistas. De media, los taxistas son unos personajes extraños que te acaban contando la mitad de su vida a la primera de cambio. Pero creo que nunca había conseguido tal concentración de historias en tres días.</span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">Vuelvo a casa con tres biografías, varios apretones de manos de chofer profesional<span> </span>y dos números de móvil nuevos, ya que los taxistas canarios, además de contarte parte de su vida, se empeñan en volver a llevarte en su coche al día siguiente o varias horas después. </span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">Nada más llegar a Las Palmas me tocó el primero de estos personajes. Era bastante joven, quizá unos treinta años. Había sido camionero autónomo para Seur hasta hacía unos meses en que quedó en paro y buscó trabajo en el taxi.<span> </span>Ahora estaba perdidamente enamorado, según me contó a modo de saludo mientras respondía un SMS, imagino que de su novia o amante, en lugar de arrancar el coche. También me contó que había engordado veinte kilos desde que se dedicaba a esto; que estaba haciendo una dieta a base de fruta; que corría todos los días cuatro kilómetros en un parque; que estaba leyendo "Caballo de Troya" y enganchado a él, me dio la impresión de que desde hace varios meses (parece más un atasco que un enganche); que no había conseguido acabarse "Crimen y castigo"; que le perdía para su dieta el asado de pata que ponían en un bar más o menos cutre en las cercanías del aeropuerto; que había visto cuatro veces seguidas "El último samurái" en su época de camionero cuando iba con el camión en el ferry que une Las Palmas con Santa Cruz de Tenerife; que … ¡yo que sé cuántas cosas más! Al final se acabó el trayecto y me quedé sin saber más detalles de su enamoramiento. Aunque igual le puedo llamar por teléfono para preguntarle, porque fue uno de los que se empeñó en dejarme su número de teléfono.</span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">El siguiente taxista comunicativo no era un aborigen canario, sino un "godo", como nos dicen aquí a los peninsulares. Ni más ni menos que salmantino, y, fiel a su recio origen castellano, no llegó a esos extremos comunicativos, pero ya hizo sus pinitos y me llegué a enterar de sus orígenes, su llegada a Fuerteventura, su inicio en el mundo del taxi, sus opiniones sobre el turismo en la isla, … </span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">El tercero y último es chileno, aunque tiene pinta de vivir en Canarias desde hace por lo menos treinta años. Casi acabamos de separarnos, después de un fuerte apretón de manos que se ha empeñado en darme junto a la maleta que sacaba del portaequipajes. Llegó a España por casualidad, después de embarcarse en Chile, Viña del Mar para ser exactos, en una aventura con su mejor amigo que les llevó a Dinamarca, para trabajar en un barco danés y recorrer medio mundo. El trabajo acabó y no todo era tan fácil en Dinamarca, así que cogió un tren hasta Hendaya. Desde allí otro a Bilbao, casualidades de la vida, y finalmente un autobús a Santander donde se suponía que iba a trabajar en algún barco que salía de allí para Chile. Cuando llegó a Santander, el barco ya no necesitaba marineros y tampoco había más barcos por allí que los necesitaran. Se acordó de una novia canaria, que probablemente podía haber sido un amor de paso si el barco de Chile no llega a fallarle, y decidió venir a Las Palmas a buscar trabajo. No sé cuantos años después, ha trabajado de soldador, en tierra; de mecánico de mantenimiento, de nuevo en un barco; de operario en una tabaquera, otra vez en tierra, y finalmente de taxista cuando la correspondiente multinacional absorbió la planta de tabaco y decidió cerrarla y trasladar la producción a algún país de Europa del Este, más barato. Ahora, muchos años después de su llegada, con dos hijos ya mayores, pero que aún viven en casa, y casado con la mujer que podría haber sido sólo un recuerdo, compra vino chileno en el Alcampo para curar su nostalgia y, por lo que he comprobado, se dedica a contarle su vida a los que se dejan, imagino que para huir de la soledad de las horas que pasa esperando en el taxi, sin hablar con nadie.</span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">Y me diréis que a vosotros que os importa todo esto que os estoy contando: vidas (¿normales?) de personas anónimas. Pues probablemente lo mismo que a mí. Nada en especial. Os juro que yo no los he provocado, ni les he preguntado por su vida, ni casi les he respondido más de lo estrictamente necesario para ser amable. Pero debo de tener en la cara algo parecido a un cartel con el texto "señor taxista cuénteme usted su vida", porque, sin buscármelo, sé la vida de varios de ellos. Taxistas de Barcelona, París, Las Palmas de Gran Canaria, Madrid, Fuerteventura, Bilbao, Valencia, … me han contado en algún momento a lo largo de los últimos quince o veinte años su vida, el origen de sus mujeres o amores, sus preocupaciones familiares, … Y eso que no cuento a los que simplemente me han dado la chapa hablando de política o de futbol o del tráfico. Hablo sólo de los que me cuentan cosas que yo considero más o menos privadas y personales.</span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">Supongo que tienen ganas de hablar, que están cansados de estar solos tantas horas sin hacer nada más que esperar, no sabiendo nunca si son dos minutos o dos horas lo que falta para salir corriendo quién sabe hacia dónde.</span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">Y tengo que decir que ahora mismo los entiendo. Aquí, mirando el panel de mi vuelo retrasado, con no sé si cinco minutos o una hora por delante para salir corriendo hacia una puerta de embarque desconocida, me han entrado ganas de hablar con alguien y de contarle un poco de mi vida (sólo un poco, que soy muy pudoroso).</span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">Así que me he puesto a escribiros.</span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">Sólo es eso: ganas de hablar producidas por soledad, aburrimiento, esperas de duración imprecisa, retrasos, taxistas, aeropuertos, ...</span></p> <p class="MsoNormal" style="MARGIN: 0cm 0cm 10pt"><span style="font-size:100%;">…</span></p>C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-51168141577727251332009-05-09T17:56:00.001+02:002009-05-09T17:56:28.873+02:00Noches largas<p class="MsoNormal">No sé muy bien por qué, o sí que lo sé pero he decidido no contároslo aquí porque no es lo importante, pero el caso es que me ha costado mucho dormirme esta pasada noche y, como no podía dormir, he cogido el Ipod y me he puesto a escuchar música.<br></p> <p class="MsoNormal">Cuando me lo compré, pensé que no quería uno de los pequeños, mucho más manejable, sino uno de los que ahora llaman "classic" con su pequeño disco duro, en el que caben muchos gigas. Lo decidí así, porque me apetecía meter en él toda o casi toda la música que pasara por mis manos, incluyendo cosas que no me gustan especialmente y que me habían llegado por casualidad, a través de mis sobrinos, amigos, curiosidades puntuales, … De vez en cuando, eso me permite darme a mí mismo sorpresas y descubrir o recordar canciones que unos minutos antes ni se me habían pasado por la cabeza.</p> <p class="MsoNormal">Está noche de insomnio he ido a parar a un grupo de canciones que no escuchaba seguidas desde hace por lo menos veinte o veinticinco años. De allí he saltado a otras canciones de la época. Y de ellas, ya fuera del Ipod, a uno de los bares en las que solía escucharlas, a los amigos y amigas con los que las compartía, a las sensaciones de entonces, las buenas y las malas. Al recuerdo de tener toda la noche y toda la vida por delante para escuchar canciones, hablar con los amigos y arreglar el mundo en una oscura mesa, rodeados de humo y con un vaso en la mano. </p> <p class="MsoNormal">Tengo que reconocer que me ha puesto un poco nostálgico volver a mis veinte años y volver escuchar, casi al final del recorrido, <b style="mso-bidi-font-weight:normal"><i style="mso-bidi-font-style:normal">Suzanne</i></b> de Leonard Cohen, casi con la misma pasión de entonces. Reconozco que, a pesar de mis clases de inglés, Leonard Cohen me sigue resultando incomprensible, pero la canción sigue resultando evocadora y muy especial. Llena de recuerdos de esa época tan especial en la que todo estaba por pasar.</p> <p class="MsoNormal">Miro el tiempo transcurrido y, a pesar de todos los cambios, me doy cuenta de que sigo siendo el mismo y que lo que entonces me emocionaba me sigue emocionando ahora.</p> <p class="MsoNormal">Aquellas también eran noches largas como ésta, pero eran voluntarias.</p> <p class="MsoNormal">Aunque, en cierto modo, las mañanas eran incluso peores que las de ahora.</p> <p class="MsoNormal">Son las ventajas de fumar y beber menos.</p> <p class="MsoNormal"><span lang="EN-US" style="mso-ansi-language:EN-US">…</span></p> C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-60941096327973109302009-04-28T23:03:00.001+02:002009-04-28T23:03:55.816+02:00Cosas importantes<p class="MsoNormal">Sube al vagón de metro mirando hacia los lados y, al mismo tiempo, al cristal de la puerta de enfrente. Busca su reflejo y, al mismo tiempo, nuestras miradas que, imagino, espera llenas de admiración.<br></p> <p class="MsoNormal">Aunque hay sitio de sobra, no se sienta para no arrugarse. Va de punta en blanco: traje gris tan impecable que parece recién comprado, camisa rosada sin corbata, zapatos italianos recién estrenados, pelo perfectamente despeinado y encrespado a base de productos cosméticos, barba de cuatro días perfectamente recortada hace menos de una hora, reloj enorme de diseño, …</p> <p class="MsoNormal">Se ve reflejado en los cristales, en los que no deja de mirarse, y se nota que se gusta. Nos mira a los demás como si fuéramos pequeños mortales grises y él un selecto personaje del Olimpo de los cuerpos danone.</p> <p class="MsoNormal">Se estira una vez más la americana ya sin un pliegue, como para lucir aun más, y en ese momento se entreabre un poco y descubro que tiene la cremallera del pantalón abierta.</p> <p class="MsoNormal">A pesar de estar cuidando su imagen de forma continua, ha dejado descuidado un detalle fundamental. Un detalle menor, que no se ve en esos espejos cuando se mira de perfil, pero que hace que no me resulte fácil parar la carcajada que ya se me escapaba. Un detalle que hace que me resulte aun más ridícula esa pose de modelo perdido en el metro, a la vuelta del trabajo de la mayoría de la gente, nosotros, ya despeinados y ajados por una jornada larga y no demasiado<span style="mso-spacerun:yes"> </span>grata.</p> <p class="MsoNormal">Sospecho que algunas veces nos pasa eso a todos: nos pasamos la vida mirándonos al ombligo. Creemos que lo tenemos todo controlado porque controlamos las cosas menores y resulta que, fuera de los reflejos en que nos vemos pero a la vista de cualquiera que pasa por ahí, está esa "bragueta abierta" que tira por los suelos nuestra pose.</p> <p class="MsoNormal">Las cosas importantes tienen a veces la propiedad de ser las menos evidentes para nosotros mismos y todo lo contrario para los demás. </p> <p class="MsoNormal">Cuestión de puntos de vista.</p> <p class="MsoNormal">…</p> C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-90732907807666675802009-04-13T22:21:00.002+02:002009-04-13T22:25:51.668+02:00Feng Sui<p class="MsoNormal">En cierto modo, es muy<span style="mso-spacerun:yes"> </span>divertido.<br /></p> <p class="MsoNormal">Yo tenía la teoría de que no era un lugar especialmente interesante, pero resulta que el baño de mis suegros debe de encajar con alguna de las características del feng-sui para "lugares que inspiran". Lo digo porque no es la primera vez que, estando en él y bajo la ducha, se me ocurren cosas para escribir en este blog. Son temas completos, con desarrollo, texto detallado, conclusión y hasta variantes estilísticas.</p> <p class="MsoNormal">Luego, según me seco con la toalla, se me olvida todo lo que se me había ocurrido.</p> <p class="MsoNormal">Esa es la razón por la que ahora estoy escribiendo esto: porque el otro día se me ocurrió un tema estupendo mientras me duchaba y ahora ya no me acuerdo de nada.</p> <p class="MsoNormal">Digamos que éste es el post sustituto. </p> <p class="MsoNormal">Si alguna vez vuelvo acordarme del otro, quizá os escriba el original, aunque puede suceder que no lo haga.</p> <p class="MsoNormal">Nunca se sabe, hay historias que sólo funcionan en un ambiente determinado y fuera de él<span style="mso-spacerun:yes"> </span>ya no parecen interesantes.</p> <p class="MsoNormal">Debe de ser un efecto del feng-sui.</p> <p class="MsoNormal">O una <i style="mso-bidi-font-style:normal">neura</i> mía.</p> <p class="MsoNormal">…</p>C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-62216830799944458902009-03-31T22:57:00.002+02:002009-03-31T23:12:36.904+02:00Fotos<div><br /></div>No puedo evitarlo: una vez más, me pongo a pensar en escribir y estoy viendo que me va a volver a salir algo triste o, al menos, melancólico.<div><br /></div><div>Y sé que me voy a ganar una nueva queja por parte de alguna de mis lectoras (los hombres, o no me leen o, al menos, no lo confiesan).</div> <div><br /></div><div>Pero no lo puedo evitar, así que sigo con lo mío.</div><div><br /></div><div>Lo que os quería contar es que hace un rato me he quedado mirando, casi sin darme cuenta, algunas de esas fotografías que tenemos por ahí en un marco desde hace años y a las que normalmente no hago ni caso. Hoy, no sé por qué, mis ojos se han detenido en una foto de mis dos hijas, hace ya por lo menos tres años, abrazadas debajo de una toalla azul y muy sonrientes. Tan frágiles y tan felices que no he podido evitar echar de menos las oportunidades que ya he perdido de disfrutar de ellas. </div> <div><br /></div><div>Un par de estanterías más arriba, mis ojos se han parado en otra foto en la que abrazo a mi hija mayor, y entonces única, con el mar de fondo. Ella está feliz, refugiada en mi abrazo protector, y es diminuta si la comparo con la niña de ocho años que es ahora. En cierto modo, ni ella ni yo somos ya los mismos. Ni yo soy tan grande ni ella tan pequeña que parece apenas una muñeca a mi lado. Y he vuelto a tener esa sensación de tiempo desaprovechado sin disfrutar todos y cada uno de los minutos que estábamos juntos.</div> <div><br /></div><div>A veces pienso en todo el tiempo que nos pasamos "peleando" con esos pequeños monstruos que pueden llegar a ser. Intentando que coman, que se vistan, que dejen de dar la lata, que estudien, que dejen de ver la tele, de saltar por la casa o, al menos, de tomarnos el pelo. Lo comparo con el tiempo que dedicamos simplemente a disfrutar los unos de los otros y me da la sensación de el saldo es muy negativo, que desaprovechamos demasiadas oportunidades.</div> <div><br /></div><div>No sé por qué razón, creo que pasamos más tiempo intentando cambiar a las personas que queremos que disfrutando de como son.</div><div><br /></div><div>Y hoy, quizá más que nunca, tengo una sensación imprecisa. No sé exactamente cómo describirla, pero es algo así como que me da la impresión de que perdemos tiempo y oportunidades de ser felices sin más con las personas a las que queremos, necesitamos y nos necesitan. Y ese tiempo y esas oportunidades ya no vuelven.</div> <div><br /></div><div>Si me paro a pensarlo y me pongo muy racional, sé que es mi obligación hacer todo lo posible por ellas y eso incluye muchas veces dar consejos y hasta órdenes, echar broncas, poner límites y castigar de alguna forma las malas actitudes. Todo lo que sea necesario para intentar que cometan la menor cantidad posible de errores, para que aprendan a distinguir lo que está bien de lo que está mal, para que no se hagan daño a si mismas y a los demás.</div> <div><br /></div><div>Pero, en momentos como éste, me entran ganas de saltarme las normas, de disfrutar sin más cada segundo de su compañía, de consentirlas y de extraer todo el cariño que sean capaces de darme, incluso con malas artes y sobornos. </div> <div><br /></div><div>Al final me pierde el sentido común, me doy cuenta de que es una actitud muy egoísta y que, en el fondo, está mal.</div><div><br /></div><div>A veces me gustaría ser menos racional y poder vivir todo el tiempo como en esas fotos: con una eterna sonrisa y disfrutando de esos abrazos como si fueran lo único importante.</div> <div><br /></div><div>...</div>C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-66049277106318397332009-02-16T22:38:00.002+01:002009-02-16T22:41:32.407+01:00AlegríasEl otro día me dijo una amiga que sólo escribo cosas tristes y, mirándolo un poco, llegué a la conclusión de que es verdad. <div><br /></div><div>Incluso cuando intento escribir sobre algo alegre, o al menos positivo, me sale un regusto melancólico. Fijaros bien, el último post intentaba contar en positivo que, con los años, parezco ir aprendiendo a tomarme las cosas con un poco más de humor y relajación, pero no he podido evitar traer al frente un recuerdo triste que parece haberlo teñido todo.<div><br /></div><div>Así que llevo unos días dándole vueltas a la razón por la que, la mayor parte de las cosas que escribo y, me temo, de las que se escriben en general, tienden a ser tristes, a hablar de pérdidas.</div><div><br /></div><div>Y, como no podía ser menos, he desarrollado una pequeña teoría que quería contaros. Creo que lo que sucede es que, cuando vivo los episodios alegres, tengo la sensación de que las cosas fluyen de una forma tan natural, tan inconsciente, que parecen no estar pasando, en el sentido de que dejan huellas muy ligeras, imperceptibles.</div> <div><br /></div><div>En cambio, la melancolía, la sensación de pérdida, la tragedia incluso, tienen los bordes bien marcados. Dejan cicatrices que no se difuminan tan fácilmente.</div><div><br /></div><div>Un día de mar en calma, dulce y placentero se confunde entre muchos otros días felices y somos tan estúpidos que, al cabo de un tiempo, llegamos a pensar que no han existido. Sólo cuando perdemos esa felicidad, cuando la echamos de menos, nos damos cuenta de lo que ya no está ahí. Somos capaces de ver el hueco que ha dejado vacío algo que no conseguíamos ver cuando lo teníamos delante de nuestras narices.</div> <div><br /></div><div>Las cosas se ven, no sé si mejor, pero sí más, desde la pérdida.</div><div><br /></div><div>Por eso, la vida recordada tiende a parecer una sucesión de pérdidas, cuando en realidad ha sido una cadena de hallazgos, imagino que la mayor parte positivos.</div> <div><br /></div><div>Lo confieso, recordar momentos felices suele parecerme cursi o sensiblero. A veces lo hago, cuando nadie se da cuenta, pero, cuando escribo, me parece que aprendo más de las pérdidas, los fracasos, las ausencias, los desencuentros, las lágrimas, ... Me parece más literario, más auténtico, más intenso, ...</div> <div><br /></div><div>Cuando estás alegre, vives.</div><div><br /></div><div>Cuando estás melancólico, escribes.</div><div><br /></div><div>...</div><div><br /><div><br /></div><div><br /></div></div></div>C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-4825595920576822662009-02-05T23:24:00.003+01:002009-02-09T15:42:32.248+01:00Hacerse mayor<div><br /></div>Un día cualquiera por la mañana. Espero al metro para ir a trabajar. <div><br /></div><div>En el andén, sentado en un banco, un hombre de edad imprecisa, quizás un poco más joven que yo. Bajo su cazadora, viste ropas que parecen de operario y botas reforzadas de seguridad. Tiene el pelo, más largo de lo habitual, recogido en una coleta y, en la mano, sujeta un cómic de Mortadelo y Filemón, de esos gordos que recopilan varias historietas.<div> <div><br /></div><div>No puedo evitar quedarme mirándolo mientras ríe a carcajadas, como sí la vida fuera algo sencillo y sólo lo inmediato, la historieta que lee en ese momento, tuviera importancia.</div><div><br /></div><div> No puedo evitar mirarlo, ni envidiarlo.</div><div><br /></div><div>No puedo evitar preguntarme dónde se quedó mi infancia inocente y despreocupada.</div><div><br /></div><div>Cuando llega el metro, un día más abarrotado, y me encajo entre el resto de seres humanos somnolientos y cargados de responsabilidades y preocupaciones que parecen poblar ese pequeño microcosmos, me doy cuenta de que, de nuevo, me estoy engañando. </div> <div><br /></div><div>Yo no tuve nunca una infancia inocente y despreocupada o, si la tuve, ya no la recuerdo.</div><div><br /></div><div>Me recuerdo siempre cargado de consciencia, sentido común, obligaciones, responsabilidades, miedos, sentimientos de culpabilidad, ... o cualquier otra cosa de esas que ahora mismo daba por hecho que sólo sienten los adultos.</div> <div><br /></div><div>A veces pienso, y creo que alguno ya me habréis oído decirlo, que yo nací ya bastante mayor. Sólo hace falta mirar alguna de mis fotos de niño, con cuatro seis u ocho años. Siempre serio. A veces hasta triste. Y también pienso que me hice todo lo mayor y responsable que se puede llegar a ser a los dieciocho o diecinueve años. Y que, por suerte, a partir de ese momento, no me quedó más remedio que empezar a ser menos responsable y serio. Y que tuve que pasar por reírme un poco de mi mismo y mi seriedad, hacerme más gamberro y menos formal, para poder madurar. Para poder empezar a tener las cosas menos claras y hacerme más tolerante a los fallos. A los míos y a los de los demás. </div> <div><br /></div><div>Desde entonces no sé si he sido más feliz, pero creo que me lo he pasado mejor y he estado menos veces triste, aunque no niego que, con frecuencia, he vuelto a estar preocupado. </div><div><br /></div><div> Pero he visto y sigo viendo todavía como los grandes dramas suelen tener un día siguiente en el que las cosas vuelven a andar, más o menos. He visto como muchas de las que parecían caídas en picado hacia el abismo acababan en una remontada, si no digna, al menos esperanzadora.</div> <div><br /></div><div>Así que, con el tiempo, igual puedo conseguir sentarme una mañana en el anden del metro a leer un cómic y reírme de la vida, sin otra preocupación que lo inmediato.</div><div><br /></div><div>Igual hacerse mayor tiene su lado bueno.</div> <div><br /></div><div>...</div></div></div>C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-59092291001868233972009-01-19T09:04:00.001+01:002009-01-19T09:04:28.890+01:00PrincipiosTengo la sensación de que este año no quiere empezar de verdad o que empieza de una forma perezosa, como arrastrando lastres del pasado.<div><br></div><div>Aunque igual es una sensación subjetiva.</div><div><br></div><div> Mirándolo bien, me estoy dando cuenta de que el nuevo año, ciclo, o como queramos llamarlo, se nos está echando encima con sus cambios, novedades y pequeñas revoluciones, que acompañan a las rutinas de siempre.</div><div> <br></div><div>Cambios en las relaciones. Pequeños secretos a voces que afloran a la superficie. Un poco de dolor. Algo de alivio. Necesidad de volver a enfrentar la situación vital y los problemas del día a día. Todo ello si esa sensación de tregua que las vacaciones y el final de año parecen darnos, aunque no nos demos cuenta mientras duran.</div> <div><br></div><div>Definitivamente, creo que el que no arranca soy yo. Pero las cosas a mi alrededor ya han arrancado y avanzan a toda velocidad.</div><div><br></div><div>¿Hacia dónde?</div><div><br></div><div>Eso mismo quisiera saber yo.</div> <div><br></div><div>En mañanas como ésta, mientras me dirijo al trabajo, tengo la tentación de pensar que hacia algún precipicio.</div><div><br></div><div>Igual es mejor tomar un café, despejarme y ver si sólo se trata del principio del día laboral, siempre desazonador, que se suma al desconcierto del principio del año.</div> <div><br></div><div>Nada que no se cure con un poco de tiempo.</div><div><br></div><div>...</div> C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-64184993705232788022009-01-09T22:53:00.001+01:002009-01-09T22:53:13.470+01:00Días raros<br><div>Éstas últimas semanas han sido unos días raros: me apetecía escribir muchas cosas y no he sido capaz de escribir ni un solo post realmente nuevo para este blog desde hace varias semanas.</div><div><br></div><div>La verdad es que no ayuda mucho esto de haber estado de un lado para otro, en casas prestadas, sin ordenador, sin Internet.</div> <div><br></div><div>Una vez leí o escuche, creo que a Vargas Llosa, que la inspiración existe, pero te tiene que pillar trabajando para que sirva para algo. </div><div><br></div><div>Tener una idea brillante mientras te duchas o cuando te despiertas fuera de tu casa sirve para distraerte y tardar un poco más en ducharte o levantarte, pero casi nunca se acaba transformando en algo productivo y real, si no puedes ponerte a escribirlo en los quince o treinta minutos inmediatos. </div> <div><br></div><div>Así que últimamente empiezo a pensar en comprar un miniordenador o una grabadora o algo que me permita guardar en un soporte estable lo que acabo de pensar, casi en el mismo momento en que se me ocurra, porque confieso que tengo una facilidad pasmosa para olvidar los detalles de cosas que había imaginado con muchísima nitidez.</div> <div><br></div><div>Aunque, pensándolo bien, igual la solución es más sencilla y puedo recuperar la vieja idea de utilizar el papel para escribir las cosas que se me ocurren cuando no tengo un ordenador a mano. </div><div> <br></div><div>También es verdad que ya no estoy seguro de si seré capaz de escribir algo que no sea la lista de la compra en un papel. Cada día me cuesta más no poder borrar o incrustar nuevo texto en una frase que acabo de escribir. </div> <div><br></div><div>Ahora casi me parece mentira que pasara los primeros veintitrés años de mi vida sin tocar un ordenador.</div><div><br></div><div>Pero, por otra parte, viendo mi letra, ya se veía venir que mi relación con los manuscritos no tenía muy buenas perspectivas.</div> <div><br></div><div>...</div> C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-60843157496839709562008-12-30T11:19:00.004+01:002008-12-30T11:29:16.839+01:00Deseos<div style="text-align: left;"><span class="Apple-style-span" style=" ;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">Alguno de vosotros habrá pensado que, por fin, me había lanzado a escribir un post pornográfico o, por lo menos, erótico que le pusiera un poco de picante a este blog. Lamento defraudar una vez más las expectativas, pero lo de "deseos" del título, va de algo tan sencillo y tan convencional como lo de los buenos deseos que todo el mundo tiene en estas fechas para todo el mundo.</span></span><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;"><br /></span></div> <p class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt:auto"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">Yo no voy a ser menos y os deseo para el próximo año:</span></span></p> <ul type="disc"> <li class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;mso-list:l5 level1 lfo1;tab-stops:list 36.0ptcolor:black;"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">a los que han descubierto cuál es el problema que tienen,</span></span></li> </ul> <p class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt:auto; margin-left:60.0pt"><span style="mso-bidi- ;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">que descubran ahora cuál es la solución y sean creativos y pacientes para ponerla en marcha: una vez que sabes cuál es el problema, ya tienes la mitad de la solución.</span></span></p> <ul type="disc"> <li class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;text-align:left;mso-list:l2 level1 lfo3;tab-stops:list 36.0ptcolor:black;"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">a los que no han descubierto nada nuevo últimamente,</span></span></li> </ul> <p class="MsoNormal" align="left" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;margin-left:60.0pt;text-align:left"><span style=" mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">que lo descubran y que sea bueno: bastantes miserias y problemas solemos tener como para añadir más.</span></span></p> <ul type="disc"> <li class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;text-align:left;mso-list:l3 level1 lfo4;tab-stops:list 36.0ptcolor:black;"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">a los que quieren cambiar de vida,</span></span></li> </ul> <p class="MsoNormal" align="left" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;margin-left:60.0pt;text-align:left"><span style=" mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">que éste sea el año, mejor en el primer trimestre, en el que suceda: ya llevamos tanto tiempo deseándolo que nos lo hemos ganado.</span></span></p> <ul type="disc"> <li class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;text-align:left;mso-list:l3 level1 lfo4;tab-stops:list 36.0ptcolor:black;"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">a los que no quieren cambiar de vida,</span></span></li> </ul> <p class="MsoNormal" align="left" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;margin-left:60.0pt;text-align:left"><span style=" mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">que les siga gustando lo que hacen y que nada se tuerza: también se lo han ganado.</span></span></p> <ul type="disc"> <li class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;mso-list:l4 level1 lfo2;tab-stops:list 36.0ptcolor:black;"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">a los que están enamorados,</span></span></li> </ul> <p class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt:auto; margin-left:60.0pt"><span style="mso-bidi- ;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">que sigan estándolo y que reciban lo mismo a cambio.</span></span></p> <ul type="disc"> <li class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;mso-list:l4 level1 lfo2;tab-stops:list 36.0ptcolor:black;"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">a los que han estado enamorados y quizá no puedan seguir estándolo,</span></span></li> </ul> <p class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt:auto; margin-left:60.0pt"><span style="mso-bidi- ;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">que mantengan el cariño y que sean capaces de afrontar las nuevas situaciones con buen humor y espíritu positivo: además del amor con mayúsculas, existen otros amores con minúsculas (amigos, familia, ...), que son los que de verdad consiguen, cuando lo hacen, que la vida sea redonda.</span></span></p> <ul type="disc"> <li class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;mso-list:l4 level1 lfo2;tab-stops:list 36.0ptcolor:black;"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">a los que no están enamorados,</span></span></li> </ul> <p class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt:auto; margin-left:60.0pt"><span style="mso-bidi- ;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">que encuentren el amor de su vida (correspondido, claro) y que lo disfruten.</span></span></p> <ul type="disc"> <li class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;text-align:left;mso-list:l0 level1 lfo5;tab-stops:list 36.0ptcolor:black;"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">a los que están esperanzados y con mucha ilusión por las cosas que han empezado este año,</span></span></li> </ul> <p class="MsoNormal" align="left" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;margin-left:60.0pt;text-align:left"><span style=" mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">que, si son de las que hay que acabar, las acaben pronto y triunfen con ellas;</span></span></p> <p class="MsoNormal" align="left" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;margin-left:60.0pt;text-align:left"><span style=" mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">que, si son de las que hay que seguir con ellas para los restos, les dure mucho la ilusión con que ahora las encaran.</span></span></p> <ul type="disc"> <li class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;text-align:left;mso-list:l6 level1 lfo6;tab-stops:list 36.0ptcolor:black;"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">a los que no tienen ningún deseo ni ilusión,</span></span></li> </ul> <p class="MsoNormal" align="left" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;margin-left:60.0pt;text-align:left"><span style=" mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">que los encuentren este año: seguro que hay muchas cosas con las que merece la pena ilusionarse.</span></span></p> <ul type="disc"> <li class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;mso-list:l7 level1 lfo7;tab-stops:list 36.0ptcolor:black;"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">a los que ...,</span></span></li> </ul> <p class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt:auto; margin-left:60.0pt"><span style="mso-bidi- ;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">que ...(que cada uno rellene los puntos suspensivos con su propias prioridades y deseos)</span></span></p> <ul type="disc"> <li class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;text-align:left;mso-list:l1 level1 lfo8;tab-stops:list 36.0ptcolor:black;"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">y a todos</span></span></li> </ul> <p class="MsoNormal" align="left" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;margin-left:60.0pt;text-align:left"><span style=" mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">que seáis muy felices </span></span></p> <p class="MsoNormal" align="left" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;margin-left:60.0pt;text-align:left"><span style=" mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">y que sepáis querer y dejaros querer por los que os rodean</span></span></p> <p class="MsoNormal" align="left" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt: auto;margin-left:60.0pt;text-align:left"><span style=" mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">este año próximo y todos los siguientes.</span></span></p> <p class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt:auto"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;"> </span></span></p> <p class="MsoNormal" style="mso-margin-top-alt:auto;mso-margin-bottom-alt:auto"><span style="mso-bidi-;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">...</span></span></p>C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-52945837318556032932008-12-05T00:18:00.002+01:002009-01-19T09:14:06.175+01:00El sueño de escribir, describir los sueños y ... escribir con sueño<div>Dice mi querida y, en muchos casos, admirada Paloma Díaz-Mas, en un artículo relativo al proceso creativo de parte de su novela <em><strong>El sueño de Venecia</strong></em> que he encontrado recientemente, que "la creación literaria [...] surge de una extraña combinación de anecdotas triviales y recuerdos transcendentes".</div> <div> </div> <div>No sé si esa afirmación es o no completamente cierta, pero algunas veces pienso que el balance de nuestra vida también va teniendo mucho de eso, de mezcla de anecdotas triviales y recuerdos o momentos transcendentes. Así que es muy probable que, si puede aplicarse a la vida, casi seguro que, en mayor medida, puede hacerse con la escritura.</div> <div> </div> <div>Sucede que a veces, especialmente cuando me pongo a escribir, tengo tendencia a ver las cosas desde un punto de vista más transcendente de lo que en realidad son y, por esa razón, cosas que no dejarían de ser pequeñas anécdotas, a veces pasajeras, toman un "peso de trascendencia" que les hace ser vistas con una nueva luz, como si fueran más importantes que en el momento en el que estaban sucediendo.</div> <div> </div> <div>Y, en parte, eso es lo que me gusta de escribir. </div> <div> </div> <div>Escribir permite recrear el mundo, llenarlo de matices, de ángulos realmente difíciles de percibir en el suceder cotidiano, en el que las cosas pasan tan rápido y tan rodeadas de sus propias circunstacias que sólo puedes captar esa anécdota que parece trivial. Escribir permite rellenar los huecos, resaltar o suavizar las luces, iluminar las zonas oscuras, expulsar o exaltar lo feo y, al final, poner las historias que cuentas al servicio del sentimiento que quizás no tuviste en el momento de vivirlas, pero que sí que tienes en el momento de recordarlas.</div> <div> </div> <div>Cuando pienso en todo el tiempo que hemos pasado los sucesivos grupos de personas de los que he formado parte, de niños y no tan niños, recordándonos unos a otros las historias compartidas, reinventándolas las más de las veces, no puedo más que ver que este deseo de recrear y transformar en parte parte lo vivido es algo común y mucho más extendido de lo que pueda parecer. </div> <div> </div> <div>Recuerdo a algún amigo de la infancia, ya perdido para siempre en ese desconcertante vacío en el que desaparecen las personas con las que dejas de relacionarte después de haber sido amigos íntimos, que poseía una capacidad y vocación para la recreación de historias digna de los mejores cuentistas. Me recuerdo sorprendido al escuchar como en la historia que él contaba, supuestamente correspondiente a alguna "aventura" en la que yo también había participado, los montes eran más altos que en mis recuerdos, las acciones más arriesgadas, la pasión más intensa, las nevadas más frías, las chicas más guapas o más feas, ... Incluso aparecían personajes o episodios que yo juraría que nunca habían existido en la versión básica y más realista de la historia. Estoy convencido de que, a base de contar la historia una y otra vez con esos aderezos o "licencias poéticas", él mismo acababa creyendo que eran parte de la historia real. Incluso alguna vez empezó a parecerme que la parte soñada, inventada, de la narración iba haciéndose cada vez más hegemónica y amenazaba peligrosamente con acabar dejando lo real reducido a la nada. Confieso que alguna vez llegué catalogarlo directamente como un mentiroso, pero visto desde ahora, creo que quizá sólo estaba describiendo sus sueños.</div> <div> </div> <div>Después de él, he visto a otras personas haciendo lo mismo, aunque creo que de forma no tan exagerada. Hasta yo mismo me he sorprendido iniciando un proceso similar cuando recreaba las historias que contaba. Pero no puedo evitarlo, siempre he sido demasiado consciente y, según empiezo a embarcarme en una invención pura, me veo a mí mismo desde fuera hablando como un estafador y no tengo más remedio que volver a la realidad.</div> <div> </div> <div>Por eso creo que sueño con escribir historias. Cuando escribes algo supuestamente inventado puedes añadir todos los detalles que quieras, perspectivas imposibles, personajes nuevos, cambiar el orden de los acontecimientos, hacer que ganen los buenos o los malos según te apetezca, ... y todo ello es válido y hasta bueno.</div> <div> </div> <div>Lo que muchas veces no confiesas es que, detrás de lo que inventas, hay más cosas reales de las que parece. Igual que detrás de lo que muchas veces todo el mundo cuenta como si fuera real, hay muchas cosas inventadas.</div> <div> </div> <div>Todos somos unos mentirosos en potencia o, quizá, unos artistas que reflejamos el mundo desde un punto de vista "más creativo".</div> <div> </div> <div>Creo que esta noche no voy a ser capaz de decidir cuál es la interpretación más correcta, así que os dejo, que tengo sueño y ésto, más que sobre el sueño de escribir o sobre describir los sueños, empieza a ser, literalmente, escribir con sueño.</div> <div> </div> <div>...</div> <div> </div> <div>(No quiero dejar este post sin recomendaros que leáis <strong><em>El sueño de Venecia</em></strong>, de Paloma Díaz-Mas. Creo que debería ser lectura obligatoria: está muy bien escrito, se aprende más sobre literatura española y estilos literarios que estudiando varios años y, además y no menos importante, es divertido)</div>C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-27356283947167383402008-11-17T11:03:00.001+01:002008-11-17T11:03:10.271+01:00Fechas (post "de desagravio")<br><div>Resulta que soy un desastre para las fechas, los números, ...</div><div><br></div><div>No es algo nuevo ni mucho menos. A algunos de vosotros creo que ya os he contado que una vez me olvidé hasta de mi propio cumpleaños. En ese caso era seguro que la razón no era la edad, ya que, aunque no lo recuerdo con precisión, debía tener unos diez u once años y sólo descubrí que era mi cumpleaños porque me llegó una postal (eran aquellos tiempos en que aun se mandaban felicitaciones por escrito porque en algunos sitios no había teléfonos).</div> <div><br></div><div>En los últimos años, lo compenso apuntando todo por duplicado o triplicado: en el móvil, en el Outlook de la oficina, en papeles que sujeto con imanes al frigorífico, ... </div><div><br></div><div>A veces, a pesar de todo, falla el método. He comprobado que especialmente si es domingo.</div> <div><br></div><div>El último despiste en mi historial, de ayer mismo, es el cumpleaños de una de las principales y más constantes seguidoras de este blog. Incluso, a riesgo de equivocarme, creo poder asegurar que es la persona, que se esconde detrás del "anónimo" autor del último y uno de los pocos comentarios que tiene (por cierto, muchas gracias).</div> <div><br></div><div>Así que, ya sé que suena a disculpa repetida, pero no tenía más remedio que escribir este post para intentar compensar de alguna forma mi despiste.</div><div><br></div><div>Ya sabes que te mereces que te deseemos felicidad (mucha). A mí, desde luego, me hace un poco más feliz el saber que de vez en cuando te pasas por aquí e incluso algunas cosas de las que escribo te interesan.</div> <div><br></div><div>Felicidades.</div><div><br></div><div>...</div><div><br></div><div><br></div><div><br></div> C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2038204189027826095.post-56483913367324739332008-11-02T00:14:00.001+01:002008-11-02T00:14:32.414+01:00Tiempo para pensar<br>Es curioso, uno encuentra a veces las respuestas donde menos las espera.<br><br>El otro día estaba en una reunión de la que no esperaba nada. Fui sólo con el objetivo de salir de allí cuanto antes, de no perder demasiado tiempo. Las personas que hablaban eran de ese tipo de las que crees que no vas a sacar nada nuevo o, por lo menos, nada que te pueda servir. Sin embargo, una de ellas dijo, como sin querer, algo que me lleva haciendo pensar desde entonces. No soy capaz de repetir sus palabras exactas, pero desde entonces me han hecho pensar bastante.<br> <br>Quizá es esta época del año, con el invierno llamando a nuestra puerta, los primeros fríos intensos, la lluvia cayendo para volverlo todo más frío e incómodo o simplemente que vivo rodeado de gente que tiene problemas que tienen más que ver con cómo se sienten que con otro tipo de necesidades más físicas, yo mismo entre otros. Personas que ya tienen calefacción, pero que siguen necesitando calor humano, cariño o simplemente comprensión.<br> <br>Lo cierto es que esa persona dijo algo así como que vivimos una vida llena de ocupaciones y horarios, de deberes y obligaciones, de compromisos y citas, de retos y esfuerzos, pero que casi siempre acabamos dejando a un lado lo más importante: compartir esa vida y sobre todo nuestros sentimientos con las personas que nos rodean. Que, por ejemplo, vivimos preocupados por conseguir para nuestros hijos todo menos lo que ellos más necesitan, que es estar con nosotros y que les escuchemos, que les abracemos y juguemos con ellos. <br> <br>Dándole vueltas a lo que dijo, se me ocurren más ejemplos, como que invitamos a nuestros amigos a lo que haga falta, pero no siempre a compartir los sentimientos. Que preguntamos a nuestros familiares cómo se sienten de salud o en qué ocupan su tiempo, pero nos cuesta muchísimo escucharles cuando nos responden, especialmente si nos hablan de sus sentimientos. Yo personalmente, cuando alguien tiene la valentía de contarme de verdad como se siente, la mitad de las veces empiezo a quitarle hierro y a dar consejos antes de haber acabado de escuchar cómo se sienten. <br> <br>No sé si es pudor. No sé si es miedo a que su desánimo se me contagie. No sé si es simplemente prisa para poder pasar cuanto antes a la siguiente ocupación. Lo que sí sé es que, por ese procedimiento, acabo pasando por la vida de una forma superficial, preocupándome por las necesidades prácticas mías y de los demás, pero dejando para mañana otras necesidades, como la de pararse a pensar, la de escuchar a los demás lo que de verdad esperan de mí, la de querer a fondo y sin prisas a los que me quieren. Bueno, es peor que eso. Hago como por puro trámite esas cosas: pienso lo imprescindible, escucho lo justo para no parecer insensible y quiero, pero con prisas, a las personas que están a mi alrededor. Pero siempre estoy demasiado ocupado, un poco enfadado y con prisa por llegar a algún sitio o resolver alguna necesidad, cumplir algún compromiso o simplemente descansar.<br> <br>No me siento un bicho raro, es más, creo que este tipo de comportamiento es de lo más habitual. Es lo que hacen muchas otras personas que se preocupan por los demás (no incluyo a aquellos que sólo piensan en su interés). En cierto modo, somos como los déspotas ilustrados: trabajamos para aquellos a los que queremos, pero sin mezclarnos mucho con ellos. Pero nos puede pasar lo mismo que a algunas "perfectas anfitrionas" que conozco: trabajan tanto para hacernos la vida más fácil y agradable, para tenerlo todo en su punto, que no lo comparten con nosotros, porque siempre están ocupadas dejándolo todo perfecto para que lo disfrutemos. El problema es que nosotros no habíamos ido sólo a estar a gusto o comer en sus casas, habíamos ido, sobre todo, a estar con ellas.<br> <br>No sé. Estos días no dejo de pensar y creo que eso, en si mismo, ya es bueno.<br><br>...<br> C.http://www.blogger.com/profile/14504431748262815761noreply@blogger.com1